Dosificación del Aceite Esencial de Lavanda
Para su uso tópico, es importante diluir el aceite de lavanda en un aceite portador antes de aplicarlo en la piel. Aquí tienes algunas recomendaciones para diluirlo:
- Uso corporal: 2-4%, es decir, 40-60 gotas por cada 100 ml de aceite portador.
- Uso facial: 0,5-1%, es decir, 10-20 gotas por cada 100 ml de aceite portador.
Precauciones y Contraindicaciones
Aunque el aceite de lavanda es generalmente seguro para usar en la piel, siempre es recomendable realizar una prueba de parche para descartar la posibilidad de una reacción alérgica. Además, considera las siguientes precauciones:
- No ingerir ni poner en contacto con ojos ni mucosas.
- No utilizar durante el embarazo, la lactancia o en niños pequeños.
- Si tienes alguna enfermedad crónica, consulta con un especialista antes de usarlo.
- Evita la exposición al sol después de su uso, ya que puede aumentar la sensibilidad al sol.
Cómo Elegir un Aceite Esencial de Lavanda de Calidad
Al seleccionar un aceite esencial de lavanda, hay varios factores a tener en cuenta:
- Pureza: Elige un aceite que sea 100% puro, sin aditivos ni diluyentes.
- Método de Extracción: Los mejores aceites de lavanda son los obtenidos a través de la destilación al vapor, que conserva la mayoría de los compuestos beneficiosos de la planta.
- Origen de la Planta: La lavanda cultivada en su hábitat natural (como la región de la Provenza en Francia) tiende a producir un aceite de mayor calidad.
- Envase: El aceite esencial de lavanda debe venir en un recipiente de vidrio oscuro para protegerlo de la luz, que puede degradarlo.
El Proceso de Creación de nuestro Aceite Esencial de Lavanda
La pureza de un aceite esencial depende de varios factores, como su lugar de cultivo, la época de cosecha y el método de destilación. Nuestro aceite esencial de lavanda es producido de manera artesanal en Galicia, España, bajo certificaciones de producción ecológica. Para crear un frasco de 15 ml de nuestro aceite esencial, se requiere más de un kilo de flores de lavanda, una prueba de su concentración y potencia.
Conclusión
El aceite esencial de lavanda es una herramienta increíblemente versátil con numerosos beneficios para la salud. Ya sea que estés buscando mejorar tu sueño, aliviar el dolor, cuidar tu piel y cabello, o simplemente disfrutar de su aroma relajante, el aceite de lavanda es una adición valiosa a cualquier colección de aceites esenciales. Recuerda siempre usarlo con precaución y considerar cualquier contraindicación antes de su uso.
