La huella ecológica o huella medioambiental es la forma en que se mide el impacto que los seres humanos tenemos sobre el planeta y sobre la naturaleza. El término fue definido por Mathis Wackernagel y Willia Rees en su libro Nuestra Huella Ecológica: reduciendo el impacto humano sobre la Tierra, en el año 1996. Un libro que analiza los patrones de consumo de recursos así como los de producción de residuos por parte de la población.
Más concretamente, podríamos definir la huella ecológica como un indicador de sostenibilidad que mide la superficie (en hectáreas) necesaria para producir los recursos que una persona consume. O los que consumen actividades, ciudades o países. Pero además, también calcula la superficie que hace falta para absorber todos los residuos que dichas personas, actividades o territorios generan.
Según el Fondo Mundial para la Naturaleza o, en inglés, el World Wide Fund for Nature (WWF), el objetivo de medir la huella ecológica es que cada persona de cada lugar del mundo comprenda cómo sus acciones afectan al medio ambiente.
Cómo se mide la huella ecológica
Como bien decíamos, la huella ecológica se mide en hectáreas globales y se hace por habitante y por año. El cálculo se realiza a partir de los hábitos que cada persona tiene en su día a día y se compara con la capacidad que tiene el planeta de renovar los recursos.
En esta línea, debes saber que existen cinco dimensiones básicas diferentes para medir la huella ecológica. Son las siguientes:
- Superficie artificializada o, lo que es lo mismo, la cantidad de hectáreas dedicadas a la construcción de viviendas, infraestructuras y centros de trabajo.
- Superficie en hectáreas necesaria para generar alimento vegetal.
- Superficie requerida para proporcionar pastos que alimenten al ganado.
- Superficie marina que se necesita para pescar.
- Superficie de bosque que se requiere para usarse como sumidero del CO2 generado como consecuencia del consumo energético por parte de los ciudadanos.
Respecto a esto, por otro lado, cabe apuntar que hay otros datos que no quedan registrados. Por ejemplo, la contaminación del suelo, del agua o atmosférica.
Calculadoras gratuitas de huella ecológica
Si te estás preguntando si puedes calcular tu huella ecológica en el planeta, la respuesta es sí. Existen varias vías posibles para hacerlo, totalmente gratuitas, que te dan respuesta a tu pregunta de manera fácil y rápida.
Desde Fieito vamos a mostrarte dos de las opciones disponibles: una de ellas es la calculadora del Global FootPrint Network y la otra la calculadora de la Fundación Vida Sostenible.
La huella ecológica en España
Como norma general, los seres humanos consumimos más recursos de los que el planeta Tierra es capaz de generar. El impacto de la ciudadanía es enorme y en la naturaleza cada vez hay más contaminación y más falta de recursos.
De hecho, según un informe de Red Huella Global, elaborado anualmente por la compañía internacional Global Footprink Network, España agotó el 12 de mayo de 2022 los recursos naturales disponibles para todo el año. Esto quiere decir que a partir de entonces comenzamos a consumir los de 2023, pues la naturaleza no puede ir a nuestro ritmo para renovar lo que nosotros agotamos.
Según se indica en el mismo informe, los españoles necesitaríamos 2,8 planetas para hacer frente a nuestra demanda de recursos. Pero no solo eso, sino que también somos uno de los países que más rápidamente consumimos los recursos que nos ofrece la naturaleza. De hecho, cada vez agotamos antes los recursos anuales. En el año 2019 acabamos con ellos el 29 de mayo, en 2020 lo hicimos el 27 de mayo, en 2021 el 25 de mayo y, como hemos dicho unas líneas más arriba, en 2022 el 12 de mayo.
Por eso mismo es tan importante tomar conciencia sobre este asunto y ponerse manos a la obra para revertir la situación. Porque aunque necesitáramos más, solamente tenemos un planeta y debemos cuidarlo.
Actividades que más impacto tienen en la naturaleza
Las actividades que los humanos llevamos a cabo y que impactan en la naturaleza son muchas. Por ejemplo, producir y consumir demasiados alimentos es una de ellas. También el exceso de ropa, una tendencia que llega a consecuencia del fast fashion o moda rápida.
Además, afectan al medio ambiente otras actividades como la construcción de ciudades, la quema de combustibles fósiles, la deforestación, la emisión de gases de efecto invernadero, el gasto exagerado de agua o luz y la contaminación de suelo, agua y aire, entre otras cosas.
Cómo reducir nuestra huella ecológica
Si quieres saber de qué manera puedes contribuir a una mejor salud del planeta reduciendo tu huella ecológica, sigue leyendo. Te mostramos a continuación algunas cosas que puedes hacer para ello.
En casa:
- Instala paredes y techos aislantes que mantengan una temperatura adecuada en el interior de la vivienda
- Compra ventanas de doble cristal
- Reduce el uso de calefacción y aires acondicionados
- Desenchufa los aparatos electrónicos cuando no los estés utilizando
- Tiende la ropa y no utilices secadora
- Cierra el grifo mientras enjabonas platos o te cepillas los dientes
- Utiliza bombillas de bajo consumo que no gasten demasiada energía eléctrica.
- Recicla
- Reutiliza
- Trata de evitar el plástico en la medida de lo posible
Compras:
- No uses bolsas de plástico. Una buena alternativa es, por ejemplo, esta bolsa de malla de Fieito ideal para hacer pequeñas compras
- Compra alimentos de temporada
- Consume alimentos ecológicos, como los que encontrarás en nuestra tienda
- Viste con ropa sostenible hecha a base de materiales ecológicas, libres de tóxicos, que no contaminan el medio ambiente y no dañan la piel
En otros ámbitos:
- Reduce el uso de coche y opta por el transporte público
- Si te compras un coche, intenta que sea lo menos contaminante posible
- Muévete a pie o en bicicleta por tu pueblo o ciudad
- Plantar árboles
- Apoyar a empresas que promueven prácticas eco-responsables
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